Qué hacemos

Celebración del "Día de Japón"

Lun, 12/11/2018

El lunes, 12 de noviembre de 2018 el Colegio “BIOS” hemos celebramos “El Día de Japón”.

Tuvimos la suerte de acoger a Japón en nuestro propio colegio haciendo un recorrido por cinco talleres: Deportes y juegos tradicionales de Japón, Cocina japonesa, Caligrafía japonesa, Maquillaje japonés y Cerámica japonesa.

Deportes  y juegos tradicionales de Japón.

Elisa y Emilio nos acercaron al karate​ de kara y te —"mano vacía"—, o kárate, arte marcial tradicional de las islas Ryūkyū pertenecientes hoy día al Japón, actualmente conocidas como la prefectura de Okinawa, y nos permitieron participar en unas pruebas de reflejos, agilidad, fuerza y valor...

Dependiendo de los grupos que pasaron por este taller se realizarón diversas actividades:

  • Manejo del Kendama. Aunque algunos intentaron manejar un Kendama original, la mayoría se decantó por los kendamas construidos en el colegio con material reciclado.
  • Juegos de puntería: "Bolos humanos" en el que imitamos al programa humor amarillo.
  • Pruebas de fuerza rompiendo con un golpe preciso "tablas" un poco especiales.
  • Combates de Sumo en los que se enfrentaron por parejas un gran número de alumnos e incluso profesores y porfesoras.

Esperamos algún día tener la suerte de recibir en nuestro colegio a nuestra reciente campeona mundial, Sandra Sánchez.

 

Cocina japonesa.

Abraham, cocinero del restaurante japonés “Sushi Do”, vestido para el momento, a quien no faltaba detalle como unos zapatos, los “jikatabi”, con una planta muy fina con separación entre el dedo gordo y los cuatro restantes para permitir tener mayor agarre al suelo, que también los usan en las luchas, y que llaman “pezuña de ciervo”, por la huella que deja su pisada.

Dió mucha importancia a los cuchillos bien afilados y humedecidos en agua antes de dar el corte a los alimentos para que se deslizase mejor y cuidar el producto original.

Algunos de los ingredientes que utilizó fueron: salmón, surimi, aguacate, pepino, ralladura de nabo, lechuga, arroz especial, alga nori, salsa de soja, mayonesa japonesa (más cremosa y suave que la que estamos acostumbrados), wasabi que elaboró en el mismo taller, mojando con agua el polvo de wasabi (el polvo se obtiene del tallo del wasabi, un tipo de rábano picante), se utiliza una cantidad muy pequeña y siempre acompañado por su potencia de sabor. La mezcla de mayonesa con salsa de soja y unos polvitos de shichimi (condimento típico, que se trata de una mezcla de especias), para ligar perfectamente cualquier acompañamiento.

Trajo para ilustrarnos cuencos japoneses, platos de barro, tetera pequeña para servir la soja, envases de bebidas japonesas o ediciones japonesas de Cocacola, Fanta, etc, todo lo necesario para ambientar y decorar, aspecto que dan mucha importancia en Japón porque si importante es alimentarse, también lo son la disposición de la mesa y de los alimentos para que sea apetecible, por lo que cuidan mucho la presentación y que entre por la vista antes de probarlo.

Nos presentó el uso de makisu (estera de bambú para elaborar algunos platos), los palillos para comer (con adaptador si a alguien le resulta necesario), makis (rollo), hosomakis (pequeños rollos hechos con la mitad del alga nori), temakis (rollos de mano), niguiris (se da forma al arroz y se le pone encima salmón, atún, gamba, etc en loncheado fino. Los japoneses cuidan con meticulosidad el cuidado de la materia prima, por ejemplo al hacer los makis todos han de estar al mismo tamaño, dice mucho de la profesionalidad del cocinero.

Todo lo fue preparando en el momento y se pudo ir degustando sobre la marcha. Tan sólo trajo cocinado de antemano el arroz, aderezado con un vinagre especial que permite que quede algo pegajoso y se trabaje mejor.

 

Caligrafía japonesa.

Nieves y Charo nos sorprendieron con la oportunidad de poder dibujar nuestro propio nombre en japonés con pinceles, rotuladores o pintura de dedos en diferentes plantillas. En Japón la caligrafía representa un arte denominado “Shodō” o camino de la escritura.

El japonés usa un sistema de escritura basado en tres tipos de símbolos. En primer lugar los kanji, pictogramas de origen chino que significan palabras concretas. Además utilizan dos tipos de silabarios: el hiragana, para palabras japonesas, y el katakana, usado para palabras extranjeras. Usamos katakana para escribir nuestros nombres.

Durante la realización del taller, a cada alumno se le facilitó una plantilla con su nombre escrito en japonés para que lo trazara, rellenara o siguiera el contorno. Las plantillas estaban hechas de tiras de folios o de cartulina, en función de las necesidades específicas de cada alumno.

Además hablamos de cómo funciona el idioma mediante juegos de combinación para dar lugar a palabras con diferentes kanji y visionado de diferentes ejemplos de escritura. Así descubrimos que los japoneses escriben en vertical de arriba hacia abajo y de derecha a izquierda.

 

Maquillaje japonés.

Arantxa y Sandra nos abrieron su salón de belleza de alta gama que nos permitió pintarnos como auténticos samuráis o guapísimas geishas.

 

Cerámica japonesa.

José Luis y Maribel nos permitieron visitar un taller de cerámica japonesa con una curiosa técnica, el “raku”, que traducido significa "felicidad", y está  muy vinculada a la ceremonia del té  y a la filosofía  budista zen con un retorno a lo primitivo, los participantes bebían té en las tazas que ellos fabricaban. Es una cerámica tradicional, son piezas de pequeño formato con formas muy básicas realizadas con arcillas especiales que aguantan el choque térmico, una vez secas se cuecen a 1000°C. A continuación se esmaltan y se meten en un horno  poco convencional (en nuestro caso un bidón adaptado) hasta que alcanza la temperatura de 950°C y con unas pinzas se saca al rojo vivo y se posa en un recipiente con aserrín  que genera mucho humo que penetra por las fisuras que se producen por el choque térmico lográndose efectos de colores metalizados imprevisibles.

Además durante las semanas anteriores, alumnos de distintos grupos de nuestro colegio han ido pasando por el taller de cerámica para realizar distintas piezas, han construido cajitas, abalorios y bandejas, todos con formas muy simples. Para la actividad montaron en el patio un pequeño horno con todo lo necesario para permitirnos ver el proceso  de cocción y ahumado de las piezas que habíamos trabajado anteriormente. Nos llamó la atención como salía la cerámica al rojo vivo y el humo que se producía cuando posaban las piezas sobre las agujas de pino para producir humo y contemplando al final, ya cocidas, sorprendiéndonos los resultados.

Podéis ver alguna fotos en este enlace

Fdo.: José Luis Serrano (Tutor de EBO 2)