Salida aventura al Parque de Bomberos
El viernes 16 de Octubre, los alumnos de E.B.O. del colegio BIOS realizamos una aventura maravillosa al Parque de Bomberos de Talavera. Es posible que a cualquier persona conocedora de esta profesión y de todo lo que la rodea, no se percate de la magia de superhéroes que tiene este colectivo, pero lo que es indiscutible, es que dentro del alma infantil, los bomberos, sus camiones, sus sirenas y su labor, están en la misma línea de Superman, Spiderman y otros tantos superhéroes que ven en las películas o leen en los comics.
Y allí fuimos, cargados de ilusión y con muchas ganas de disfrutar. Nos ubicaron, muy acertadamente, en una sala junto al garaje de los camiones y donde estaban situadas las bajadas de las cucañas, esas barras de metal por las que bajan los bomberos cuando suena la alarma de un incendio o algún otro suceso, donde tienen que intervenir.
Lo primero que nos presentaron fue su típica vestimenta, mucho más interesante y útil que la de Supermán, es que esta es de verdad. Nos hablaron de las ventajas de aquellos trajes, de que impedían que el fuego los quemara, del peso de sus botas y de sus pantalones, de sus chaquetas protectoras, eso fue muy interesante, pero fue más divertido cuando Elías y el pequeño Adrián, se metieron en aquel gran traje, un gran uniforme, no sólo por sus cualidades, sino porque les quedaba enorme y ellos y nosotros y nosotras reíamos viendo cómo los chicos, los bomberos y todo el mundo disfrutaban con la escena, el punto más gracioso fue cuando le preguntaron el nombre a Adrián y él dijo “Camión”. Yo no sé si los demás se percataron de la chispa del momento, pero yo me sentí feliz, viendo la amplia sonrisa de los niños y la gracia del instante vivido, fue tan emotivo y animado para ellos que Elías se puso a bailar. Esta situación, genera ganas de unirse a la fiesta y es Lucas el que quiere participar también, con su alegría, con su presencia y tuvieron la feliz idea de ponerle un casco rojo, un casco que brillaba más en su cabeza, un rojo vivo que acompañaba a la felicidad de Lucas en ese momento.Las ganas de lucir el casco se fueron contagiando y algunos niños más probaron la sensación que da tener tal protección en la cabeza, tal como si fueran astronautas o con el aspecto de algún soldado de la Guerra de las Galaxias.
Que decir tiene, que los profes pusieron su granito de alegría y animosidad al asunto y Elisa con Yolanda, contribuyeron a que aumentaran los bomberitos Bíos, cuando ellas también se vistieron con el susodicho traje, ¡estaban estupendas! y nos transmitieron mucha ternura y risas, muchas risas.
Llegó otro gran momento cuando los bomberos nos mostraron la utilidad de las cucañas, y algunos y algunas valientes quisieron lanzarse por ellas, la decidida Erica, su profe Susana, la seño Teresa y también Adrián, siempre queriendo participar y yo, desde el banco de madera, envidiando esta actitud, pues sólo pensar en lanzarme ya me da vértigo, tengo claro que las alturas no son lo mío.
Después vino el paseo en el camión de bomberos, todos los niños y profes disfrutamos del viajecito, y tras terminarlo, llegó la hora del refrigerio y niños y profesores nos comimos nuestro almuerzo con muchísimo gusto y apetito.
La visita llegaba a su fin, pero un amable bombero nos obsequió con una gran bolsa de caramelos, la alegría se podía palpar en todas las caras, y mientras yo repartía los caramelos me salió esta pequeña rima con la que termino mi relato.
Caramelos, caramelos,
caramelos de bomberos,
caramelos para niños
los reparto con cariño
dulces, dulces caramelos
caramelos de bomberos.
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Fdo: Carmen Pulido (Tutora de E.B.O. 6)
